La terapia electrotérmica, también conocida como terapia electrotérmica intradiscal, suele llevarse a cabo en hospitales o centros de cirugías. No requiere pasar la noche en el hospital ni en el centro. Antes del procedimiento, usted y el proveedor de atención médica hablarán sobre cómo debe prepararse.
Antes de aceptar someterse a este procedimiento, hágale al proveedor de atención médica estas preguntas:
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¿Por qué necesito este procedimiento?
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¿Hay alternativas?
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¿Cuántas veces ha realizado este procedimiento?
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¿Cuáles son las complicaciones?
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¿Cuándo veré los resultados?
Si no se siente cómodo haciéndole estas preguntas al proveedor de atención médica, pídale a un familiar o a un amigo que lo acompañe y las haga por usted. Estas preguntas son cruciales para su salud y su seguridad.
Las pruebas y los exámenes médicos
Le realizarán un examen médico para asegurarse de que está lo suficientemente sano para someterse a este procedimiento. También le harán pruebas en las que se obtenga información sobre el disco. Por ejemplo:
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Discografía. En esta prueba por imágenes, se inyecta un medio de contraste en el disco. Este medio de contraste se visualiza en una radiografía. La prueba se lleva a cabo para identificar el disco que causa el dolor.
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Resonancia magnética o tomografía computarizada. Estos estudios de diagnóstico por imágenes, entre otros, le permiten al proveedor de atención médica saber más sobre el daño en el disco.
Antes del procedimiento
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Informe a su proveedor de atención médica todos los medicamentos que usa. Incluya los medicamentos de venta libre como aspirinas, productos a base de hierbas, vitaminas y suplementos.
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Deje de tomar los medicamentos cuando se lo indique el proveedor de atención médica.
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Deberá dejar de comer y beber
8 horas antes de la prueba. -
Coordine con un familiar o amigo adulto que lo lleve a su casa después del procedimiento.
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Llegue con tiempo para registrarse. Deberá firmar un formulario de consentimiento informado en el que confirmará que le explicaron el procedimiento de antemano. Asegúrese de evacuar todas sus dudas sobre el procedimiento antes de firmarlo.
La preparación en su hogar
Organizar algunas cuestiones con anticipación puede hacer que la recuperación sea más fácil y segura.
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Guarde los suministros a una altura entre la cadera y el hombro. De esa manera, podrá alcanzarlos sin estirarse ni agacharse.
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Organice su transporte. Es posible que no pueda conducir durante una semana o más después del procedimiento.
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Pídale a alguien que ayude con las tareas de la casa y las diligencias cotidianas.
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Traiga calzado cerrado sin agujetas o pantuflas. Así no tendrá que agacharse para ponerse los zapatos.
